En ese tiempo comencé a tener mis primeros clientes pero no tenía claro hacia dónde iba, ya que solo lo que quería era vender sin ver más allá, hasta que un día un cliente me dijo “Luis, voy a comprarte pero quiero saber si esto es a lo que te vas a dedicar toda la vida”, al momento le respondí “¡Sí claro toda la vida!”, se lo dije solo por venderle pero la verdad es que no lo sabía,  me quede pensando en eso todo el día y fue ahí cuando decidí que era lo que iba a hacer y que sería el mejor.  Me enfoque en mejorar y dar un excelente servicio.